Sabíamos que el tabaco contribuye a la formación de la placa dental, dando lugar a la presencia de biofilm bacteriano. En Bredent, nos sumamos a la iniciativa contra el tabaquismo que ha iniciado este mes el COEM poniendo a disposición de los dentistas y del público en general, información y consejos que nos ayudarán a dejar de fumar.
Porque, más allá de lo dañino que es el tabaco para nuestra salud, centrarnos únicamente en los efectos adversos que tiene en nuestra boca es ya motivo suficiente para plantearse que este momento es un buen momento para dejar de fumar. Y es que el tabaco:
• Es la primera causa de cáncer oral
• Lesiona encías y hueso
• Oscurece los dientes
• Produce mal aliento
• Inhibe la capacidad del sentido del gusto.
Pero además, si necesitas algún estímulo extra, cabe añadir que dejar de fumar una media de quince cigarrillos diarios –la media española está en los 13,4 por día- supone un ahorro de tiempo y de dinero. Porque ocupamos en fumar 180 horas que podríamos dedicar a cualquier otra actividad… la que nos podríamos pagar, por ejemplo, con los 610€ que nos ahorramos. Y esto, solamente, cada seis meses.
Como COEM, la multinacional Pfizer, también ha iniciado una campaña de concienciación a través de la web dejadefumarconayuda.es que, además de consejos, información y artículos motivacionales, te ayuda a encontrar el centro de salud con unidad de tabaquismo más próximo a tu domicilio.
Dejar de fumar sin ayuda no es fácil. Todo lo contrario. Según los últimos estudios publicados en Reino Unido, un 64% de los fumadores quiere dejar este hábito nocivo pero del 74% que lo ha intentado sin recurrir a ayuda médica, solo un 8% ha conseguido estar sin fumar por un periodo superior a los dos años.
La ayuda del personal sanitario es fundamental. También la de tu dentista. Poniéndote en sus manos sabrás realmente cuál es tu nivel de adicción y te ayudarán a seguir las pautas necesarias para superar los momentos tan difíciles que se te vienen encima cuando decides dejar de fumar. Consulta con tu médico y déjate aconsejar por la Unidad de Tabaquismo de tu centro de salud: comprobarás que con ayuda es más sencillo. Desde allí te guiarán para descubrir cuáles son tus hábitos, cuántos los cigarros que no te apetecen, y podrás visibilizar tus avances de modo que cada pequeño éxito hará que crezca cada vez más la confianza en ti mismo. Y si necesitas ayuda suplementaria sabrán recetarte la más indicada.
Dejar de fumar puede ser una decisión dura pero una vez lo has conseguido se convierte en una de las más satisfactorias. Tanto es así que nunca olvidarás la fecha en la que dejaste de fumar… la fecha en la que volviste a ser libre.