La OMS lo reconoce como el mayor desafío para la salud humana. Y debe ser así cuando podemos encontrar, en una misma jornada, tres noticias guardan mucha relación entre sí y que, desafortunadamente, no tienen un final feliz.
Hemos dedicado tiempo y espacio para tratar de un tema que nos alarma, la RAM, la resitencia a los microbianos que ponen de manifiesto lo ineficaces que resultan ya muchos antibióticos ante enfermedades complejas… y ni tan complejas.
Hemos dedicado muchos recursos a la investigación. En cuanto a salud oral, hemos desarrollado Helbo, una terapia fotodinámica con un láser de baja intensidad capaz de destruir las bacterias de modo local sin necesidad de usar antibióticos y, por tanto, sin efectos secundarios y sin posibilidad de desarrollar resistencia a los mismos.
Nos hemos felicitado al conocer que, gracias al programa Pirasoa, al que se ha adherido el Consejo de Dentistas Anadaluz, se hayan prescrito en dos año s3 millones menos de antibióticos.
Y con todo, cuando caen en nuestras manos noticias como las que te presentamos nos damos cuenta de lo mucho que nos queda por hacer.
La primera:
Titular 1. El Mundo.
España vende sin receta fármacos prohibidos en Francia por considerarse peligrosos.
Anginovac, Bucometasana, Cohortan rectal… ¿Te suenan? Se trata de medicamentos muy prescritos y de los que muchos médicos desconocen su composición completa, aunque todos tienen algo en común: son productos antibióticos.
Una noticia como esta exige que nos coordinemos y sigamos sumando esfuerzos. Sabemos que durante este año tiene que estar implantado el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos. Se trata de frenar la tendencia a la resistencia antimicrobiana, objetivo compartido por la propia UE y que debería dotarnos de las garantías suficientes para que nuestro organismo no se convierta en un depósito de sustancias antibióticas.
Un propósito, éste, que excede el ámbito meramente médico y que precisa de la colaboración especial de controles sanitarios, también, en el campo de la alimentación. Para no tener que leer titulares como éste:
Titular 2. El Mundo.
En las granjas del Apocalipsis antibiótico.
La noticia nos lleva hasta Guangdong, en el sur de China, donde millones de cerdos se alimentan con compuestos antibióticos sin control. Una noticia que estremece. La OMS estima que el 10% de los más de 10 millones de muertes causadas por la resistencia antimicrobiana en 2050, serán chinos.
Vemos pues que ya no se sólo trata de los antibióticos prescritos por nuestros médicos sino también de las carnes y pescados que servimos en nuestras mesas. En España se ha llegado a un acuerdo mediante el cual el sector porcino va a reducir voluntariamente el uso de colistina, un tratamiento que en humanos se utiliza como tratamiento de última línea contra microbios miultirresistentes… y letales: Klebsiella pneumoniae, Acinetobacter baumannii y Pseudomonas aeruginosa,
Con todo, en España, los protocolos de actuación, aunque siempre mejorables, son claros y los animales criados en granjas o piscifactorías pasan unos controles más severos. El problema radica que muchos de estos animales “seguros” se dedican a la exportanción y, por tanto, terminamos importando producto de otros países no tan rigurosos… principalmente asiáticos.
Es lo que tiene la globalización. Se trata de un problema de todos y entre todos debemos tratarlo para que noticias como la siguiente sean solo una triste y lamentable excepción:
Titular 3. El País.
Una mujer muere en EEUU por una bacteria resistente a “todo”
Se trata de un titular que, de tan directo y simple, sobrecoge . La noticia es reciente y viene recogida en el informe semanal que emite el Centro de Control de Enfermedades de Atlanta. La paciente, que había estado tratada en diferentes hospitales de la India, estaba infectada por una bacteria “resistente a todos los antibióticos conocidos”. Se trata de la Klebsiella pneumoniae resistente a los carbapenems. La mujer fue tratada con 26 antibióticos diferentes. Pero no fue suficiente. Murió. Y lo hizo en el primer mundo, en EEUU.
Un dato para la relfexión y que puede causar temor cierto: los citados, colistina y carpabene, son nuestros antibióticos de último recurso frente a la amenaza fantasma de las bacterias resistentes.